Cuando Francisco Redondo decidió traer PUK Portacables a España desde Alemania, no lo hizo solo. Marion Redondo, su mujer, lo acompañó en todo momento y formó parte de todas las decisiones, retos y éxitos que han hecho de PUK la empresa que es a día de hoy. Durante más de 20 años se ha encargado de la administración y las finanzas de la compañía y ahora, 30 años después de que empezase este proyecto, se retira dejando un gran legado a sus hijos y a todo el equipo PUK.