Según la Unión Española de Entidades Aseguradoras y Reaseguradoras (UNESPA), los bomberos apagan un incendio cada tres minutos y medio durante los meses de más calor. La mayoría de estos incendios, un 71 %, se producen en viviendas. En comparación, un 10 % afecta a negocios, comercios y locales, y un 5 % corresponde a industrias.
En este contexto, el cableado eléctrico es una fuente potencial de incendios al liberar gases tóxicos y alcanzar altas temperaturas. Por ello, nuestros sistemas portacables son una herramienta esencial para protegernos de estos peligros por varios motivos:
1. Materiales no inflamables
Nuestros productos están fabricados con materiales no inflamables de alta calidad como el acero galvanizado, acero inoxidable y aluminio, que no solo ofrecen durabilidad sino también una alta resistencia a la propagación del fuego. Estos materiales son capaces de soportar temperaturas extremas sin deformarse ni perder sus propiedades mecánicas, asegurando que los cables albergados en su interior permanezcan protegidos.
2. Revestimientos resistentes al fuego
Además de los materiales base, nuestros productos están recubiertos con materiales resistentes al fuego. Estos revestimientos actúan como una barrera adicional, retardando la propagación del fuego y evitando que las altas temperaturas dañen los cables. Comúnmente, se utilizan recubrimientos intumescentes que, al exponerse al calor, se expanden y forman una capa aislante que protege el metal subyacente.
3. Diseño de ventilación
Nuestros diseños incluyen características que mejoran la ventilación, que es esencial para disipar el calor generado por la corriente eléctrica y cualquier posible fuente de ignición. Así logramos reducir la temperatura interna de las bandejas y minimizamos el riesgo de incendios.
4. Organización y separación de cables
Un sistema de bandejas portacables bien diseñado permite la organización y separación de cables, lo cual es esencial para la seguridad contra incendios. La separación adecuada de cables evita la acumulación de calor y la posibilidad de cortocircuitos, que son causas comunes de incendios en sistemas eléctricos. Además, facilita la inspección y el mantenimiento regular, permitiendo la detección temprana de posibles riesgos.
5. Normativas y certificaciones
Nuestros productos también cumplen con estrictas normativas y certificaciones de seguridad, reguladas por estándares internacionales reconocidos. Entre estos se encuentran las normas establecidas por el Instituto Alemán de Normalización (DIN), una de las más importantes en el ámbito de la seguridad contra incendios.
La normativa DIN 4102-12, en particular, se refiere al comportamiento ante el fuego de los elementos y materiales de edificación, incluyendo los sistemas de soporte de cableado. Esta normativa evalúa la resistencia al fuego de todo el sistema de cables eléctricos, garantizando la integridad del circuito incluso en condiciones extremas. Los sistemas se clasifican en cuatro categorías: incombustibilidad, ignifugabilidad, inflamabilidad normal y fácilmente inflamable.
Para determinar la aptitud de un sistema de portacables, se somete a pruebas rigurosas en un horno de al menos 3 metros de longitud, a temperaturas de hasta 1.000 °C, durante un período de 30 a 90 minutos. El resultado de estas pruebas se refleja en un sello de calidad. En este sello, la "E" representa la "integridad del circuito", y el número "30-90" indica la duración en minutos durante la cual se mantuvo dicha integridad.
Por estos motivos, la implementación de un sistema portacables resistente al fuego es una inversión esencial para cualquier instalación que priorice la seguridad y la eficiencia. Esto no solo limita la propagación del fuego y reducen los daños, sino que también asegura el cumplimiento de normativas de seguridad. Si tienes alguna pregunta o necesitas asesoramiento especializado, no dudes en ponerte en contacto con nosotros. Estamos aquí para ayudarte a mantener tus instalaciones libres de incendios durante todo el año.